EAST RUTHERFORD, N.J. — El FC Dallas consiguió una nueva e importante victoria en el estadio de Los Gigantes, frente a los Red Bulls New York por 2 tantos con 1, tras superar un comienzo difícil, cuando el local impuso su fútbol y se puso en ventaja apenas a los 8 minutos de comenzado el compromiso.
Mo Johnston y sus muchachos salieron dispuestos a repetir la victoria del partido anterior, cuando superaron a las Chivas USA, jugando por momentos bien y además encontrando a los protagonistas ideales para llegar al gol. Pero en esta ocasión fue solamente una ilusión, que se fue perdiendo con el transcurso de los minutos, cuando comenzó a crecer el rival y además contó con figuras claves y decisivas, el caso del guatemalteco Carlos Ruiz, que con un golazo de su sello personal, liquidó el compromiso.
El primer gol del encuentro fue conseguido por Seth Stammler y todo hacía suponer que se mantendría ese fútbol prolijo del arranque, con dos volantes centrales que ganaban el balón con una impecable presencia en la persona de Danny O'Rourke y Mark Lisi y dos laterales volantes,
esta vez sí, jugando por el sector que más rinden, Chris Henderson por derecha, de muy buena labor en los primeros cuarenta y cinco y Seth Stammler recostado sobre el lateral izquierdo.
Era más en los primeros veinte el local que contaba con un Youri Djorkaeff muy inspirado, colocando estupendos balones para sus compañeros de ofensiva, el haitiano Jean Philippe Peguero y Edson Buddle que buscaban en forma insistente por todo el frente de ataque.
Pero una golondrina no hace verano. Dallas superó el arranque y comenzó a ganar terreno, con Simo Valakari y Richard Mulrooney en medio juego y de manera especial con el permanente apoyo de Ronnie O'Brien, agrandando el terreno por derecha, donde también escalaba posiciones Bobby Rhine, mientras que si bien Chris Gbandi intentaba escalar posiciones por izquierda, de todas maneras no culminaba en forma adecuada.
Quizás el problema mayor del equipo de Colin Clarke fue la poca comunicación entre el "Pescadito" Ruiz y sus compañeros, porque aunque Kenny Cooper ponía esfuerzo y mucha fuerza, no es hábil para interpretar el talento del guatemalteco.
Red Bulls aguantó el marcador en los primeros cuarenta y cinco, aunque cada vez más retrasado y sin poder retomar el contacto con el balón, que quedaba en los pies del rival. En el minuto 75', Cooper le gana la espalda a Henderson, se queda Parke y el delantero queda en excelente posición para cabecear, logrando el tanto que le daba la paridad a su equipo.
El gol pareció tener un doble impacto, favorable para concretar la recuperación en Dallas y muy negativo para el equipo de Mo Johnston, que no tenía la fuerza suficiente para intentar ponerse nuevamente arriba en el marcador.
La salida por lesión de Carlos Mendes terminó por desequilibrar por completo al local. Carlos Ruiz bajaba constantemente a mitad de cancha y le comenzaba a ganar todos los mano a mano a Taylor Graham, que ingresó en sustitución del jugador de ascendencia portuguesa. En el minuto 86, una notable maniobra del goleador guatemalteco, luego de girar el cuerpo para un lado y otro, dejando parado a Graham, definió solo ante Tony Meola que nada pudo hacer en la incidencia.
Dallas con ese golazo de Ruiz concretaba su esfuerzo y pese a que con muchas ganas Red Bulls trató de subir buscando un milagro en los últimos minutos, estaba lejos de conseguirlo. El visitante fue el mejor y justificó su imposición aunque sea por la mínima diferencia. Los Bulls necesitan una reacción colectiva, especialmente reforzar el mediocampo, donde mientras duró Djorkaeff, menos de media hora, funcionó, pero después estuvo muy lejos de lo que seguramente va a necesitar para lograr mejores resultados.
Robert Sierra, comparte la conducción del programa "Sólo Fútbol" y en las transmisiones radiales del MetroStars por Radio WADO en Nueva York, es un periodista con años de experiencia en Uruguay y en los Estados Unidos y y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.