La primera Copa de Caridad del Dynamo no se fue de casa, luego que Houston se impusiera con marcador de 2-1 ante el visitante Rayados de Monterrey con goles de Geoff Cameron y Dominic Oduro (63' y 85'). Por los mexicanos anotó Jesús Zabala (82').
Apenas sonó el pitazo inicial del juez Anthony Russo, el cuadro regiomontano buscó la red defendida por Tally Hall. La actitud de los aztecas fue la de quitarle el balón al Dynamo y contra atacarlo.
Así se presentó la primera oportunidad de gol para Monterrey al minuto cinco en un remate de Aldo De Nigris que no logró contener por completo el meta Naranja, dejando el rebote para Darío Carreno, quien no pudo concretar porque su disparo salió desviado aun teniendo todo el arco a su disposición.
Dos minutos después, De Nigris volvió a probar a Hall, obligándolo a lanzarse para atajar el balón y evita la caída de su valla.
Eventualmente, Houston se sacudió un poco del dominio rival, adelantó sus líneas y con toque largo y cambios de frente logró mover la defensa del Monterrey, la cual con mayor trabajo mantenía su orden.
Fueron 45 minutos de fútbol de ida y vuelta en el Estadio Robertson, con mayor peligrosidad de parte de los visitantes y donde el arquero del Dynamo se constituyó en la figura, ya que sus salvadas y sus exigencias debajo de los tres palos levantaron emociones en las tribunas, las cuales correspondían con merecidos aplausos.
El cuadro Naranja tuvo ataque pero siempre se estrellaba con una fuerte muralla implantada por los Rayados, dejando sin chance el esfuerzo de los volantes locales.
Se destacaron también en la fracción inicial los jugadores Gerardo Galindo y De Nigris, el primero con lances de media distancia y el segundo con su velocidad el habilidad para dejar contrarios en el camino.
Por el Dynamo fue importante el trabajo ejercido por Brad Davis, quien tomó la responsabilidad de volante de enganche con esmero y presición surtiendo balones a sus delanteros Cam Weaver y Luis Ángel Landín.
Las acciones, aunque eran emotivas, carecieron de la verdadera pasion del fútbol: el gol. Los equipos se fueron al descanso luego de un desgaste físico a replantear sus estretegias para la segunda mitad.
Además, pese al carácter "amistoso" del encuentro, el juego violento encendió los ánimos entre los protagnosticas. El punto álgido del primer capítulo llegó al minuto 34, cuando una falta artera de Felipe Baloy sobre Corey Ashe dejó a éste último con una lesión en el tobillo que le obligó a ceder su lugar a Mike Chabala.
Por su fea infracción el recio zaguero panameño se ganó la tarjeta amarilla, al igual que De Nigris y el local Brian Mullan, quien salió del banco de suplentes para encarar al agresor.
Para el complemento, los equipos modificaron sus alineaciones. Monterrey hizo cambio de arquero haciendo ingresar Jonathan Orozco en remplazo de Omar Ortiz. Por el Dynamo Geoff Cameron ocupó el el puesto de Davis en la medular.
Este movimiento le dio el mejor resultado a Houston, porque fue Cameron quien al minuto 63 convirtió el primer gol de la noche, tras rematar un tiro de esquina de John Michael Hayden al fondo de la red.
Al minuto 68 hubo una nueva bronca en el terreno de juego luego de una falta de Eddie Robinson sobre De Nigris. Luego de la peligrosa acción sobre su compañero, el volante Luis Peréz intentó agredir a Robinson, este se defendió y se golpearon mutuamente. Esto hizo que los jugadores suplentes de ambos equipos invadieran la cancha. Luego tambien fueron expulsados los jugadores de Monterrey Felipe Baloy y el arquero Omar Ortíz. Este ultimo ya se encontraba en el banco de suplentes.
El gol del empate legó al minuto 82 en un centro de la izquierda que fue bien cabeceado por el recien ingresado Jesús Zabala, dejando al arquero Hall sin opción de atajar el cabezazo.
Tres minutos tarde, sin embargo, Houston recuperó la ventaja con un pase al vacio de Craig Waibel que fue excelentemente recibido por el atacante Dominic Oduro, quien definió con potencia y elegancia para poner el 2-1 definitivo.
Al final el Dynamo celebró la victoria reconociendo la dificultad y esfuerzo que tuvo que hacer ante un rival de categoría que no regaló nada en su visita a Houston.
Carlos Mojica colabora con sus artículos en MLSnet.com.
